
Desguace
Más allá de esta extorsión oficial, el pasaje del proyecto jubilatorio al Senado ha multiplicado el campo de maniobras contra la propuesta de elevar la jubilación mínima al 82% del salario mínimo. En Diputados, la oposición había logrado un dictamen favorable al 82% del salario mínimo, así como a la actualización de las jubilaciones de acuerdo con los índices salariales no reconocidos en el pasado. Aunque el oficialismo boicoteó su tratamiento en la Comisión de Presupuesto, los diputados estaban obligados a tratarlo en un plazo máximo de un mes, en sesión plenaria. Los propios opositores anticipaban, para esa eventualidad, una “holgada mayoría”. En vez de avanzar por ese rumbo, decidieron trasladar el trámite del proyecto al Senado, donde la relación de fuerzas es más reñida y las cooptaciones oficiales están a la orden del día. Por lo pronto, el Senado desguazó la iniciativa parlamentaria en dos proyectos separados. Por un lado, el que aumenta la jubilación mínima. Por el otro, el que establece la actualización de las restantes jubilaciones. En la tarde del martes 14, el dictamen de la Comisión de Presupuesto sólo abarcó el aumento de la mínima. El otro proyecto debe esperar su tratamiento en otra comisión. Así, ha quedado abierta la instancia de una votación amputada del proyecto original, incluso como parte de una negociación con los “K”.
Disparen contra el 82% móvil

Ganemos la calle
Lo que las conspiraciones parlamentarias no pueden cerrar es el clima de inquietud popular que se está gestando alrededor de la cuestión jubilatoria. El Partido Obrero lo ha podido pulsar con las mesas callejeras, la colocación del periódico y el inicio de una juntada de firmas por el 82% y la actualización de los haberes. En plazas y terminales de tren, se han formado colas para adherir al reclamo. Más que nunca, su porvenir depende de una gran movilización política. En los sindicatos, la batalla por el 82% y la actualización es también una bandera de lucha contra los Moyano y los Yasky, que han cerrado filas con el gobierno. Ganemos la calle, recojamos pronunciamientos en todos lados y preparemos una gran movilización al Congreso para cuando el Senado trate el proyecto. Sobre esta base, podremos quebrar las maniobras de quienes, desde el gobierno y la oposición, trabajaron durante décadas por la destrucción de las conquistas jubilatorias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario