El 14 de julio se realizó un corte de calle y un piquete en la oficina comercial de Telefónica, en Merlo, por la reincorporación de diez trabajadores despedidos de la empresa Redes, una subcontratista de Telefónica perteneciente a otra contratista llamada Retesar. En los días subsiguientes se realizaron asambleas y el conflicto se extendió con nuevos cortes, como en el edificio de Telefónica en San Justo donde, además se cortó uno de los carriles de la Ruta 3 durante varias horas. El despido de diez trabajadores a los que se les niegan tareas -sumado a los despidos de otros compañeros por organizarse y elegir sus delegados en la zona oeste del Gran Buenos Aires- es una práctica antiobrera dirigida a impedir la organización de los tercerizados, quienes han formado un sindicato llamado UETTel (Unión de Empleados y Técnicos de las Telecomunicaciones), que agrupa a los tercerizados telefónicos, que se cuentan de a miles y de los cuales la mayoría no cuenta con organización sindical alguna.
El acuerdo firmado por el sindicato telefónico, Foetra, por el pase a planta permanente y convenio telefónico de unos 200 tercerizados de Telefónica a lo largo de todo el año 2011 es insuficiente y está siendo concretado a cuentagotas, estirando los plazos al máximo como denunciamos en su momento. Mientras incorporan a algunos, las empresas aprovechan para despedir a otros -sobre todo activistas y representantes del nuevo sindicato.
Los nuevos ingresos, que deben pasar por rigurosos exámenes médicos y preocupacionales, se han congelado por problemas en el Seclo (Ministerio de Trabajo), donde uno de los requisitos para ingresar es renunciar a las tercerizadas, por lo que se pierde la antigüedad a pesar de que no se paga indemnización alguna por los años de servicio. Por eso, además de las medidas de lucha que se vienen desarrollando, se ha iniciado una campaña para que Foetra se pronuncie contra los despidos e intervenga con un plan de lucha por el pase a planta permanente y el convenio telefónico de todos los tercerizados. Esta campaña también denuncia el papel del Ministerio de Trabajo, donde Tomada es cómplice de las empresas telefónicas y del tercerismo que encuadra fraudulentamente a miles de trabajadores telefónicos en la Uocra (construcción) o Comercio, a pesar de que trabajan "al servicio de Telefónica".
Es necesario impulsar la organización de los tercerizados y la lucha por la reincorporación de todos los despedidos. Cese de toda persecución y armado de "listas negras". Pase a planta permanente y convenio de todos los tercerizados.
Pablo Eibuszyc
El 14 de julio se realizó un corte de calle y un piquete en la oficina comercial de Telefónica, en Merlo, por la reincorporación de diez trabajadores despedidos de la empresa Redes, una subcontratista de Telefónica perteneciente a otra contratista llamada Retesar. En los días subsiguientes se realizaron asambleas y el conflicto se extendió con nuevos cortes, como en el edificio de Telefónica en San Justo donde, además se cortó uno de los carriles de la Ruta 3 durante varias horas. El despido de diez trabajadores a los que se les niegan tareas -sumado a los despidos de otros compañeros por organizarse y elegir sus delegados en la zona oeste del Gran Buenos Aires- es una práctica antiobrera dirigida a impedir la organización de los tercerizados, quienes han formado un sindicato llamado UETTel (Unión de Empleados y Técnicos de las Telecomunicaciones), que agrupa a los tercerizados telefónicos, que se cuentan de a miles y de los cuales la mayoría no cuenta con organización sindical alguna. 
El acuerdo firmado por el sindicato telefónico, Foetra, por el pase a planta permanente y convenio telefónico de unos 200 tercerizados de Telefónica a lo largo de todo el año 2011 es insuficiente y está siendo concretado a cuentagotas, estirando los plazos al máximo como denunciamos en su momento. Mientras incorporan a algunos, las empresas aprovechan para despedir a otros -sobre todo activistas y representantes del nuevo sindicato. 
Los nuevos ingresos, que deben pasar por rigurosos exámenes médicos y preocupacionales, se han congelado por problemas en el Seclo (Ministerio de Trabajo), donde uno de los requisitos para ingresar es renunciar a las tercerizadas, por lo que se pierde la antigüedad a pesar de que no se paga indemnización alguna por los años de servicio. Por eso, además de las medidas de lucha que se vienen desarrollando, se ha iniciado una campaña para que Foetra se pronuncie contra los despidos e intervenga con un plan de lucha por el pase a planta permanente y el convenio telefónico de todos los tercerizados. Esta campaña también denuncia el papel del Ministerio de Trabajo, donde Tomada es cómplice de las empresas telefónicas y del tercerismo que encuadra fraudulentamente a miles de trabajadores telefónicos en la Uocra (construcción) o Comercio, a pesar de que trabajan "al servicio de Telefónica". 
Es necesario impulsar la organización de los tercerizados y la lucha por la reincorporación de todos los despedidos. Cese de toda persecución y armado de "listas negras". Pase a planta permanente y convenio de todos los tercerizados.
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