miércoles, 12 de febrero de 2014

OTHACEHÉ SE BAJÓ DEL BARCO

OTRO MOJÓN DE LA DISGREGACIÓN DEL KIRCHNERISMO

El lunes 10/2 se oficializó el pasaje de Othacehé al massismo. Ya en octubre Massa le habilitó al intendente de Merlo una colectora que dividió el voto massista local, y salvó al “vasco” de un derrumbe político estrepitoso. Como desde el PO lo denunciamos tempranamente (ver nota "Merlo: somos la tercera fuerza" http://prensa.po.org.ar/po1294/2013/11/21/merlo-somos-la-tercera-fuerza/), el salvataje desnudó enormes límites, ahora constatados, de un frente que se reclama “renovador”.
El sabatellismo, por su parte, bajó su lista local en octubre sucumbiendo a la extorsión de Othacehé de “irse con Massa”. La claudicación del progresismo K en la lucha contra el fascistoide Othacehe para contener el derrumbe del gobierno “nacional y popular” ha resultado, además de contradictoria, ineficaz.
La salida de Othacehé del “proyecto nacional” intentará ser leída por los soldados de Cristina en clave de depuración, una oportunidad para volver a la “transversalidad” que nunca debió ser abandonada. Planteos para la menguada tribuna. Lo cierto es que se trata de un mojón más en el acelerado proceso de disgregación del kirchnerismo, que albergó (y alberga) en su seno a lo más reaccionario de la derecha (los Ishii, Curto, Isfrán, Capitanich) y que lleva adelante el programa de devaluación y ajuste que esa derecha reclama.
El pasaje de Othacehé pone de manifiesto a lo que se reduce la disputa entre el gobierno y la oposición tradicional: la pelea por los aparatos del PJ en el marco de una crisis cuya factura buscan, unos y otros, descargar sobre los trabajadores.
La lucha contra los Othacehé requiere de la organización de los trabajadores de forma independiente de las variantes de derecha y sus programas. La herramienta política y de lucha es el Partido Obrero.

Analía Pascual