REGLA DE ORO DE OTACEHE:
JUSTIFICAR SU INACCION ACUSANDO A
LA OPOSICION
Jésica y Silvia, dos menores del barrio La Teja, que habían desaparecido el jueves 24 fueron
encontradas una semana después en Rafael Castillo, distrito donde una de ellas
vivió. Los familiares habían pegado afiches también allí. Vecinos de Castillo
se comunicaron con la familia cuando reconocieron a las chicas.
Es un alivio para sus familias y todos
los vecinos que se preocuparon y se movilizaron para que estas desapariciones
NO terminaran como otros casos trágicos de secuestros y trata de jovencitas por
parte de mafias.
Lamentablemente,
el gobierno de Othacehé, que tardó cuatro días en reaccionar, se muestra ahora ‘canchero’
y en un comunicado publicado en su red oficial MerloGBA (ver adjunto) acusa al
PARTIDO OBRERO de alarmismo.
A pesar de la denuncia inmediata de los
familiares, el accionar policial-municipal fue casi inexistente.
Ningunearon la denuncia: esto obligó a
los familiares a cortar la ruta 21 en La Teja y exigir la intervención de las autoridades
provinciales y nacionales. Entonces, para tapar su inacción Othacehé sacó un
comunicado en la tarde del lunes 28 (cuatro días después), diciendo que “ya se encuentran trabajando dependencias
provinciales y a nivel nacional para encontrar lo más rápido posible a las
chicas”.
Pero hoy, después de los hechos, vuelve
atrás y acusa que “el PO puso el grito en
el cielo: acusó a la Policía y al
gobierno Municipal de inacción y reclamó a viva voz la intervención del
Ministerio de Justicia y hasta del Ministerio del Interior”. ¿En qué quedamos? ¿Qué era lo correcto? ¿El
comunicado del municipio del lunes 28 que afirma que YA están actuando o el del
jueves 31 acusando al PO de pedir esta intervención?
Ningún funcionario othacehista se
acercó al domicilio de los familiares de las chicas. LOS FAMILIARES SE VIERON
OBLIGADOS A CONVOCAR UNA MARCHA para reclamar una real intervención. Pero en la Comisaría pusieron un vallado y se negaron a recibir a los
familiares y vecinos de las chicas desaparecidas. Lo que los llevó a resolver
un nuevo corte de calle (en Echeverri y 25 de mayo), como forma de presión para
que fueran recibidos. Voceros othacehistas sostienen que esta marcha: “provocó el entorpecimiento de la búsqueda
de las chicas, al tener que disponer la policía más efectivos para salvaguardar
las instalaciones de la
Subcomisaría de Matera, ante la amenaza acechante del PO”. ¡Que excusa más rídicula!
Othacehé dice que los problemas NO
existen. Que es el Partido Obrero, el que los magnifica (?!).
Nos recuerda que en Semana Santa, un
temporal dejó destruidas numerosas barriadas, sin luz, sin teléfono, sin agua, sin
techos. Hubo barrios que estuvieron TRES SEMANAS así. El gobierno municipal no
daba la cara: no tomo las medidas para resolver estas criticas situaciones.
Según Othacehé la culpa de su inacción fue del PO. Porque, afirma, los vecinos
–“instigados por el PO”- que cortaron la ruta ante la desidia oficial, no
habrían dejado pasar la ayuda oficial.
¡Pero
no vimos a Othacehé interviniendo sobre Edenor que dejó a oscuras a miles de
familias merlenses!¡Tampoco poniendo generadores de emergencia para socorrer a
los vecinos!
Lo mismo con el Ferrocarril Sarmiento:
el Partido Obrero sería el culpable –siempre según Othacehé- de los desastres
del mismo (infundios rechazados por la justicia). Pero ¿no es Othacehé, el que
se sacaba fotos, abrazándose a los Cirigliano, en inauguraciones de trenes truchas?
Othacehé acusa al PO de TODOS LOS CORTES
Y MOVILIZACIONES POPULARES en el distrito. Con macartismo, quiere que el pueblo
renuncie a su derecho de petición, manifestación y protesta frente a la negligencia
oficial, cómplice de los capitalistas saqueadores de las finanzas públicas que
juegan con las condiciones de vida del pueblo.
Las desapariciones de personas no se miden
por niveles de importancia: dos menores habían desaparecido y punto. Era
trabajo del poder político iniciar una investigación eficiente: fuga, trata,
secuestro son hipótesis que había que barajar. Allí estuvimos, apoyando la
organización de los familiares y vecinos que exigían que encararan la búsqueda.
FELICITAMOS A TODOS LOS VECINOS QUE HAN
APOYADO LA MOVILIZACIÓN POPULAR POR LA APARICION DE JESICA Y SILVIA.
ESE ES EL CAMINO: DEFENDAMOS NUESTROS
DERECHOS Y LOS DE NUESTRAS FAMILIAS. QUE NINGUN CUENTO DEL LOBO NOS LLEVE A
RESIGNARNOS.
REPRODUCIMOS
LA NOTA DEL PERIÓDICO OFICIAL DEL GOBIERNO MUNICIPAL
DE
MERLO: MERLOGBA DEL JUEVES 31 DE ENERO DE 2013
REGLA DE ORO DEL PO: CÓMO CONVERTIR
UNA DESGRACIA AJENA EN UNA VENTAJA
PROPIA
Hasta la 'aparición' voluntaria de las chicas que
habían 'desaparecido' por decisión propia en el
barrio La Teja, el Partido Obrero montó y desplegó un operativo coherente con
su histórico estilo de
incursión en la política: subrepticio, 'se hace cargo' de un problema social,
fogonea a los damnificados
a 'armar quilombo' como vía de solución, fomenta el caos y la destrucción,
defenestra el accionar del
Estado, y cuando el conflicto se halla en estado de ebullición, vuelve a las
orillas como si nada.
¿Cuál es la primera reacción de alguien que desea llevar a cabo una
acción solidaria a terceros ante una tragedia, un accidente, o cualquier
episodio que implique pérdidas y dolor para las personas?. La primera respuesta
es, obviamente, ponerse a disposición de los damnificados y colaborar en todo
lo posible para, en la emergencia, atemperar las dificultades que acarrean las
personas perjudicadas.
Lamentablemente, existe una segunda respuesta, nada agradable por
cierto, cargada de especulación de la más alta miserabailidad, y que
precisamente es la que impulsa, históricamente, el Partido Obrero, en cada una
de sus apariciones públicas: la utilización de las penurias, de las tragedias,
de las desgracias de otros, para intentar colarse por la hendija de un opaco
oportunismo que 'le sirva' para cobrar un protagonismo del que carece dentro
del sistema democrático, habida cuenta que la violencia, el vandalismo, el
sabotaje, son las herramientas con las que cuenta y que utiliza para pretender
compensar la casi nula preferencia del electorado en estos procedimientos
temerarios.
Sucedió una vez más, y en esta ocasión el escenario elegido fue la
'desaparición' de dos chicas en el barrio La Teja el pasado jueves 24 de enero.
Siguiendo al pie de la letra los protocolos pertinentes para este tipo de
casos, las autoridades policiales intervinientes pusieron en marcha los
mecanismos que llevaron a la búsqueda de las menores. A menos de 72 horas de
denunciadas las 'desapariciones', el PO puso el grito en el cielo: acusó a la
Policía y al Gobierno Municipal de inacción, reclamó a viva voz la intervención
del Ministerio de Justicia bonaerense y hasta del Ministerio del Interior (?) 'ante
la morosidad con la que está interviniendo la policía y el poder político del
municipio'. Al mismo tiempo, activó un corte vehicular (una de las
especialidades de la casa) en la céntrica intersección del Barrio Matera, en
Etcheverry y 25 de Mayo, como así también provocó el entorpecimiento de la
búsqueda de las chicas, al tener que disponer la Policía más efectivos para
salvaguardar las instalaciones de la Subcomisaría de Matera, ante la acechante
amenaza del PO, siempre tan dispuesto "a romper todo" aquello que sea
sinónimo de "lo establecido".
Al igual que en la semana santa de 2012, cuando la mitad del pueblo
merlense ayudaba a la otra mitad tras el feroz paso del tornado, estos
muchachos se dedicaban a cortar las rutas en reclamo de lo que sea, en lugar de
ponerse al lado de la gente que necesitaba cortar las ramas de un árbol caído
sobre sus casas, que le alcancen un bidón de agua, que le tiren un colchón o
que le presten ropa seca.
O cuando simplemente incendiaron los vagones del Sarmiento en
'represalia' por el mal servicio de la ex TBA, episodio que no culminó en una
tragedia solo porque Dios así lo quiso: con una sencilla variación de la
dirección del viento de aquella mañana en la zona de la estación Merlo hubiera
alcanzado para lamentar hasta pérdidas humanas. Tremendo.
Y hoy volvieron a las andadas: dos familias preocupadas por encontrar a las
chicas 'desaparecidas' fue suficiente caldo de cultivo para pergeñar la idea de
siempre, convertir la desgracia ajena en una ventaja propia.
Por último, muchos se preguntarán ¿qué pasó con Yésica y Silvia?. A
ver, las dos adolescentes regresaron a sus respectivos hogares de la misma
forma en la que habían 'desaparecido', es decir por propia voluntad. Mientras
duró la búsqueda, la langosta pasó por Matera, y aquí no ha pasado nada.
Redacción de MerloGBA