domingo, 8 de agosto de 2010

La oposición tampoco quiere a los jubilados

Propone liquidar la previsión social por una "asignación universal"
 

Dos economistas ubicados en el centro izquierda acaban de plantear una “reforma integral” del sistema previsional (ver Clarín del 20 y 22/7), en consonancia con la postura del capital financiero, que sostiene que el régimen jubilatorio es inviable debido al crecimiento de la expectativa de vida. Se trata de Aldo Isuani, presidente del partido de Margarita Stolbitzer en la Capital, y de Rubén Lo Vuolo, ligado a la Coalición Cívica, que irrumpen con esta posición cuando el Congreso tiene en carpeta la propuesta del 82% para la jubilación mínima y de generalizar el fallo Badaro para el conjunto de los jubilados que vieron congelados sus haberes. Isuani y Lo Vuolo pasan por alto, por supuesto, las sucesivas confiscaciones que ha sufrido el sistema y el desvío de sus recursos. También ignoran las enormes pérdidas que han sufrido las inversiones que se hicieron con su dinero en el marco de la bancarrota financiera internacional. También omiten el crecimiento del trabajo en negro, que representa al 45% de la fuerza laboral, la reducción de los aportes patronales y los aumentos salariales ‘no remunerativos’. Isuani admite, a lo sumo, que “la precarización del trabajo” es “otro factor” de la crisis jubilatoria, pero ‘juiciosamente’ la asume como irreversible. A Isuani y Lo Vuolo ni siquiera se les ocurre la ‘solución’ berlusconiana de aumentar la edad para jubilarse, seguramente porque saben que la desocupación de masas llegó para quedarse.
Ambos plantean sustituir el régimen de previsión por “un beneficio básico universal para todos los mayores, más allá de si pertenecieron o no al mercado de trabajo”. Este “beneficio” debería situarse “en torno al salario mínimo, y esa debería ser la única responsabilidad estatal en lo previsional”. O sea que los técnicos de la oposición justifican por entero la política de los K, que ha llevado efectivamente al 85% de los jubilados a la categoría mínima, es decir de subsistencia. Para ir más allá de esto, Isuani propone un “régimen de capitalización voluntaria”, o sea, una re-privatización del sistema jubilatorio. El trabajador, en este caso, deberá asumir todos los riesgos de la especulación financiera y las bancarrotas que la acompañan (crisis 2001). Los centroizquierdistas abolen el derecho a la jubilación; la caja de la Anses podría destinarse de este modo a financiar a los capitalistas –lo que ya están haciendo los K.
Estas opiniones dejan al desnudo la intención de los opositores de frenar las iniciativas legislativas que han impulsado solamente para ganar cartel. Bajo la presión de los lobbies capitalistas, la oposición quiere transformar ese proyecto en una “asignación universal por jubilado”.

Marcelo Rama

No hay comentarios: